Pues si, el trío fantástico se ha puesto de nuevo en ruta en plena feria de Sevilla. Esta vez hemos sustituido al Migué por el Paco, que deseamos esté disfrutando en Rota de su magnífica y espectacular mansión, conseguida después de arduas negociaciones con los banqueros de turno. Sí, él sabe mucho de esas cosas, si necesitáis que os negocien algo, no dudéis, solicitar sus servicios. Bueno y además de eso, pues nos hemos metido en el cuerpo 45 kilómetros de nada buscando la ciudad perdida de Laelia. Sí perdida, porque nosotros por lo menos, no la hemos encontrado, tan solo adivinado. La ruta no es que merezca mucho la pena, los caminos son malos y feos, mucho sube y baja y tres pueblos por atravesar, pero bueno si al menos hubiéramos dado con las piedras, pues te conformas y ya está. Volveremos algún día y os aseguramos que la encontraremos, ese día nos llevaremos el sombrero de indiana "yon" y el látigo por si las moscas. Nuestro compañero Paco tuvo que irse disparao carretera "pabajo" en busca de Sevilla, y el Patxi y yo, con toda la flema del mundo y un tormentón detrás siguiéndonos las ruedas, cuando llegamos a Tomares, pues ya sabéis, lo acostumbrado, cervecitas y a casa. ¡Oye! de nuevo muchas gracias por el vinito que me has regalado y que caerá esta noche en compañía de quien me espera siempre con buena cara cuando regreso de alguna barbaridad de esas que hacemos.Saludos a todos y nos vemos el 1 de Mayo en el Torrecilla y Alcazaba.
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