Po bueno, ante todo felicitar el nuevo año a todas y todos mis queridos falsos llanos y seguidores de este fabuloso blog de montaña, para que nos traiga infinidad de nuevas rutas a cual mejor y más potentes y la salud suficiente para llevarlas a cabo. Y bueno, y también deciros que hoy primer Miércoles de este nuevo 2012, pues el Migué, el Pepe y el que tanto escribe, cogieron sus máquinas de pedalear y se fueron dirección a Alcalá de Guadaíra a visitar las ruinas romanas de Gandul. El camino no es que sea demasiado bonito, no, tan solo es facilón, muy llanito, pero que sin embargo la llegada a Alcalá es impactante cuando de pronto y teniendo el río Guadaira a tu derecha te tropiezas con el fabuloso y flamante puente del Dragón. Todavía quedan buenos ingenieros , con buen gusto y una imaginación sin límites para crear estos entornos. Rodeada Alcalá y siempre con el río a nuestra derecha, cruzamos la autovía de Málaga y del tirón el Gandul. La verdad que es lamentable el estado en que se encuentra este amplísimo conjunto arqueológico. Basuras por doquier, huellas de quad, motos y coches por todos lados y hasta una competición de esas que se visten totalmente de militares y se ponen a pegarse tiros unos a otros con bolitas de pinturas, pero hasta dentro de las mismas ruinas ¡eh!. Bueno, yo los cogía y les daba un par de añitos de mili voluntaria, como los que tuvo que tragar el que escribe y verás tú si se les quitaban las ganas de pegarse tiritos unos a otros....
Localizamos solo algunos restos del megalitismo funerario, en concreto el Tholos de las canteras y la cueva del Vaquero, ambos reconstruidos y protegidos para que los quad no pasen por encima. También de la necrópolis romana el mausoleo circular, que parece ser que ha sido mal interpretada su reconstrucción ??? Bueno, pensábamos también subir al Toruño, máxima elevación y con vértice geodésico, que corona la mesa del Gandul, pero una valla lo rodea totalmente y aunque localizamos una entradita encubierta, algunos no quisieron entrar con las bicis. Bueno, ya iremos algún día andando para ser pisado convenientemente por los falsos llanos.
Y nada más, vuelta pa casita que aún había que hidratarse a la llegada con unas jarritas de cerveza de medio litrillo que sirven en un bareto de Tomares del cual no pienso hacer propaganda por lo lentos que son en el servicio...
Como siempre: SALUD Y FALSOS LLANOS.
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